martes, 26 de enero de 2010

El blanco y el negro


Creo que en la última semana he tenido la oportunidad de ver las dos películas más opuestas de los últimos estrenos. La primera, que es la parte blanca de esta entrada, ha sido "No es tan fácil". No pensaba verla porque parecía la típica comedia sosa con guión insulso que sale cada cierto tiempo. Pero me decidí a hacerlo porque me gusta mucho Meryl Streep ( ha sido nominada por este papel a un Globo de Oro) y no quería perder la esperanza, así que lo hice y el resultado fue inmejorable. No es que haya sido una historia increible pero la película ante todo es muy entretenida, eso fue lo mejor, que no me salí de ella hasta que ví los créditos, te mantiene atenta cada momento. Lo segundo es que aunque trata de temas reales y cotidianos, no cae en tópicos y pone a los dos protagonistas al mismo nivel en todos los sentidos, económico, sentimental...y eso si que es bastante raro de ver. Por la parte de Alec Baldwin, no es que sea mi actor preferido, pero encaja bastante bien en la historia y que puedo decir, que me divertí tanto viéndola que os la recomiendo a todos.
Ahora viene la parte negra, la parte aburrida, la que anuncian a bombo y platillo como si fuera una de las producciones de la temporada, la que tiene 5 nominaciones a los globos de oro y no ha ganado ninguno gracias a dios, porque hacía tiempo que no me aburría tanto...Este prodigio del cine del que hablo se llama Nine!, que nos la venden con grandes estrellas y con nuestra Penélope que me parece estupenda y de hecho en su número musical lo hace maravillosamente, pero que no hay quien la aguante. Es una historia aburridísima, que no cuenta nada, solo el estado de ánimo de un director de cine... creo que eso es todo, sin quererlo he contado el principio, el final y toda la trama de la película. El caso es que para musical en Broadway puede que funcione muy bien, pero para cine no.

1 comentario:

  1. Estoy totalmente de acuerdo con la crítica de Nine. Es muy aburrida y sólo Penélope Cruz mantiene la atención del espectador. El que le tenga manía a Penélope (que hay muchos) que ni siquiera la vea.

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